Todos eran agradables y excepcionales.

Los desayunos con ingredientes de buena calidad.

Las habitaciones con camas cómodas, maravillosas vistas y también galletas. Ubicación cerca de lugares de interés turístico, también de una parada de metro.

La propiedad estaba impecable y era magnífica, la ubicación era bonita y perfecta. Las habitaciones eran funcionales, modernas y contaban con una excelente cama y ropa de cama de buena. La comida estaba buena, el personal era super amigable y muy complaciente. Los servicios eran muy buenos. Lo que es más, el parking público estaba cerca. Me ha encantado el hotel en general.

Nos hospedamos en un hotel súper bien ubicado, cerca de la catedral de San Esteban donde ocurrieron un montón de eventos históricos importantes. Además, tuvimos la suerte de vivir algo único: el escenario de la Ópera Estatal se convirtió en una enorme pista de baile por una noche. ¡Fue alucinante! Definitivamente, no puedes visitar Viena sin pasar por la Ópera y disfrutar de una actuación.

Lo único que podríamos haber pedido es que el hotel tuviera más opciones para los jóvenes que les gusta ir de fiesta. Aunque el hotel fue genial en términos de ubicación y servicios, nos hubiera encantado tener información sobre clubes o discotecas cercanas donde pudieramos seguir la diversión después de un largo día de turismo.

Hotel totalmente reformado y muy bien situado para visitar los principales monumentos de Viena y la zona comercial. A dos minutos de una estación de metro y a cinco de los autobuses que llevan al aeropuerto. El precio incluye café, té o infusiones durante todo el día.

Este hotel moderno y maravilloso ocupa un edificio perfecto de estilo histórico. Registro rápido y personal excepcional y acogedor. Una habitación enorme, la comida era fresca y el servicio estupendo. Baño con un secador de pelo, una ducha a ras de suelo y toallas y una ducha adaptada. La ubicación es fantástica y también increíble, está justo al lado de la Plaza de San Esteban. Hay que recordar que está al lado del centro.

Ubicación estratégica, personal amable, esfuerzo por hacer agradable la estancia, tranquilidad, buen desayuno.

La ubicación era increíble y estupenda para mí, está a 400 metros de la Plaza de San Esteban. Encima, estaba al lado del centro de la ciudad y de muchos restaurantes locales.

Habitaciones enormes y compactas, cuentan con galletas, una cama excelente y además té.

Increíble ubicación cerca del Danubio y del metro. Muy cercana a la estación de tren y a las zonas de tiendas. Limpieza impecable y desayuno delicioso. El personal fue muy amable y servicial.

Nada que pueda disgustar.

El Alma Boutique Hotel es un hotel sin grandes lujos, sin embargo con toques de diseño que lo hacen atractivo. Se trata de un Hotel funcional, con unas instalaciones modernas y bien seleccionadas, lo que proporciona que sea un hotel muy cómodo. Las habitaciones presentan un tamaño estandar, unos 20-22m2, aunque el hecho de tener una óptima distribución (no hay pasillos, ni pilares y la ducha está integrada en el espacio de habitación), hace que la sensación de espacio sea correcta.Dicho todo lo anterior, para mí lo mejor del hotel es su ubicación, en pleno centro, al lado de los principales monumentos y calles comerciales y a la vez muy bien comunicado por metro, autobús y tranvía, lo que lo hacen muy apropiado para hacer turismo urbano. Entre 1 y 10 : 8,5

Como punto débil podríamos decir que el personal es un poco escaso y que las habitaciones no están perfectamente insonorizadas.

Habitación única y compacta con tanto maravillosas vistas como una bañera. Todos los servicios eran estupendos. Es increíble la ubicación en una zona concurrida, hay una estación de metro cerca del hotel. Está a 2 km de lugares turísticos como la Ópera Estatal de Viena.

Nos encantó este lugar. La ubicación era perfecta, estábamos cerca del centro de la ciudad y a solo 5 minutos a pie de Morzinplatz, la estación del autobús del aeropuerto que salía cada 30 minutos sin paradas. A pesar de que la habitación era pequeña, estaba perfectamente decorada. El personal del hotel era extremadamente servicial y amable. Siempre resolvieron todas nuestras dudas y nos dieron recomendaciones útiles. Además, las instalaciones del hotel eran estupendas. Disfrutamos de la terraza y también del desayuno que estaba incluido en el precio de la habitación. Sin duda, recomendaríamos este lugar a nuestros amigos.

Recomendaría este hotel a mis amigos.

La ubicación es excelente, muy cerca del centro andando y muy próximo a una estación de metro. Es muy nuevo y las camas son muy confortables. El personal muy atento.

El desayuno está atendido por una sola persona que es insuficiente en los momentos de aglomeración.